El museo Marmottan se ha convertido en una de las mejores colecciones de pintura impresionista.
Esta colección forma un conjunto muy completo y representativo de este movimiento. Posee más de trescientas pinturas, pasteles, acuarelas y esculturas de los artistas creadores del grupo o de los que se unieron posteriormente.
También expone alrededor de 200 grabados medievales del siglo XIII al XVI y un importante conjunto de mobiliario, estatuas de bronce y pinturas de la época napoleónica.
Está ubicado en un pabellón antiguo que fue adquirido en 1882 por Jules Marmottan. Su hijo Paul, remodeló todo el lugar para crear un espacio más amplio, dónde exponer las pinturas, el mobiliario y los bronces de época napoleónica, que tenía en propiedad la familia. Cuando muere, en 1932, los fondos de sus colecciones son legados a la Academia de Bellas Artes, también su Biblioteca de Boulogne y su hotel particular, transformado posteriormente 2 años más tarde en museo.